Mateo 18:11-14
“Porque el Hijo del Hombre ha venido para salvar lo que se había perdido. ¿Qué os parece? Si un hombre tiene cien ovejas, y se descarría una de ellas, ¿no deja las noventa y nueve y va por los montes a buscar la que se había descarriado? Y si acontece que la encuentra, de cierto os digo que se regocija más por aquélla, que por las noventa y nueve que no se descarriaron. Así, no es la voluntad de vuestro Padre que está en los cielos, que se pierda uno de estos pequeños.”
“También debes saber esto: que en los postreros días vendrán tiempos peligrosos. Porque habrá hombres amadores de sí mismos, avaros, vanagloriosos, soberbios, blasfemos, desobedientes a los padres, ingratos, impíos, sin afecto natural, implacables, calumniadores, intemperantes, crueles, aborrecedores de lo bueno, traidores, impetuosos, infatuados, amadores de los deleites más que de Dios, que tendrán apariencia de piedad, pero negarán la eficacia de ella…” (2 Timoteo 3:1-5a)
Algunos extraviados, otros señalados, otros desorientados, otros guiados por la carne y sus deseos
“Y manifiestas son las obras de la carne, que son: adulterio, fornicación, inmundicia, lascivia, idolatría, hechicerías, enemistades, pleitos, celos, iras, contiendas, disensiones, herejías, envidias, homicidios, borracheras, orgías, y cosas semejantes a estas; acerca de las cuales os amonesto, como ya os lo he dicho antes, que los que practican tales cosas no heredarán el reino de Dios.” (Gálatas 5:19-21)
y en este momento no heredarán el Reino de Dios porque
“… esta es la condenación: que la luz vino al mundo, y los hombres amaron más las tinieblas que la luz, porque sus obras eran malas. Porque todo aquel que hace lo malo, aborrece la luz y no viene a la luz, para que sus obras no sean reprendidas.” (Juan 3:19-20)
¡Pero espera! No vengo a señalar a nadie, más bien a recordarte que dentro de este grupo alguna vez también estuvimos nosotros ¿Lo recuerdas?
“por cuanto todos pecaron, y están destituidos de la gloria de Dios” (Romanos 3:23)
¿Y sabes qué fue lo más hermoso?
¡Que no teniendo parte, llegamos a ser parte! ¡Alguien llegó y no miró nuestras fallas, solo vio nuestro rumbo perdido, tuvo misericordia y se incomodó! Dispuso de su tiempo, nos tuvo paciencia y decidió compartirnos la Palabra de Dios, nos brindó una buena noticia a nuestra vida extraviada, ese alguien llegó para hablarnos de Jesús y de su obra redentora en la cruz del calvario, de que sí había esperanza para nosotros: esa oveja perdida y extraviada. Luego decidimos creer y aceptar a Jesús como nuestro Señor y Salvador… pero…
¿Donde ha quedado el
“…de gracia recibisteis, dad de gracia” (Mateo 10:8b)?
¿Dónde ha quedado
“El que cree en mí, como dice la Escritura, de su interior correrán ríos de agua viva.” (Juan 7:38)?
¿Ganar almas para Cristo? ¿Para qué o por qué?
1. Porque es de sabios ganar almas
“El fruto del justo es árbol de vida; Y el que gana almas es sabio.” (Proverbios 11:30)
2. Porque si seguimos a Jesús deberíamos entonces buscar la oveja que se ha perdido
“Y les dijo Jesús: Venid en pos de mí, y haré que seáis pescadores de hombres.” (Mateo 1:17)
3. Porque necesitan de un apoyo ¿Le compartimos de Jesús?
“sepa que el que haga volver al pecador del error de su camino, salvará de muerte un alma, y cubrirá multitud de pecados.” (Santiago 5:20)
“A algunos que dudan, convencedlos. A otros salvad, arrebatándolos del fuego; y de otros tened misericordia con temor, aborreciendo aun la ropa contaminada por su carne.” (Judas 1:22-23)
4. Porque nada nos impide brindarles ayuda, ¿No somos la luz del mundo?
“Vosotros sois la luz del mundo; una ciudad asentada sobre un monte no se puede esconder. Ni se enciende una luz y se pone debajo de un almud, sino sobre el candelero, y alumbra a todos los que están en casa. Así alumbre vuestra luz delante de los hombres, para que vean vuestras buenas obras, y glorifiquen a vuestro Padre que está en los cielos.” (Mateo 5:14-16)
5. Porque debemos ser respuesta de parte de Dios ¿Cómo ver al perdido, al desorientado y al abatido y no levantarle?
“¿Cómo, pues, invocarán a aquel en el cual no han creído? ¿Y cómo creerán en aquel de quien no han oído? ¿Y cómo oirán sin haber quien les predique? ¿Y cómo predicarán si no fueren enviados? Como está escrito: !!Cuán hermosos son los pies de los que anuncian la paz, de los que anuncian buenas nuevas!” (Romanos 10:14-15)
¿Somos entendidos?
“Los entendidos resplandecerán como el resplandor del firmamento; y los que enseñan la justicia a la multitud, como las estrellas a perpetua eternidad.” (Daniel 12:3)
Ellos necesitan saber que Jesús es
“… el camino, y la verdad, y la vida; nadie viene al Padre, sino por mí.” (Juan 14:6)
¿Extendemos nuestras manos por el perdido así como alguien lo hizo con nosotros?
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Dios te continúe bendiciendo y que sigas teniendo un excelente día en Cristo Jesús!