Proverbios 18:1-2 (TLA)
«El que es egoísta sólo piensa en sí mismo y no acepta ningún consejo. Al tonto no le interesa aprender, sino mostrar lo poco que sabe.»
«Bendito sea el Dios y Padre de nuestro Señor Jesucristo, que nos bendijo con toda bendición espiritual en los lugares celestiales en Cristo» (Efesios 1:3)
Así es, es bueno dar gracias al Señor por brindarnos la oportunidad de poder estudiar, por la capacidad de poder retener lo estudiado y más aún de poder aplicar lo aprendido con tal de adquirir nuevo conocimiento y experiencia mediante las situaciones vividas. No esta mal estudiar, lo malo se halla en pensar que ya todo lo sabemos. Debemos entender que nunca vamos a dejar de aprender debido a que el Señor
«Todo lo hizo hermoso en su tiempo; y ha puesto eternidad en el corazón de ellos, sin que alcance el hombre a entender la obra que ha hecho Dios desde el principio hasta el fin.» (Eclesiastés 3:11)
Por poner un ejemplo
«Mientras Pablo los esperaba en Atenas, su espíritu se enardecía viendo la ciudad entregada a la idolatría. Así que discutía en la sinagoga con los judíos y piadosos, y en la plaza cada día con los que concurrían. Y algunos filósofos de los epicúreos y de los estoicos disputaban con él; y unos decían: ¿Qué querrá decir este palabrero? Y otros: Parece que es predicador de nuevos dioses; porque les predicaba el evangelio de Jesús, y de la resurrección. Y tomándole, le trajeron al Areópago, diciendo: ¿Podremos saber qué es esta nueva enseñanza de que hablas? Pues traes a nuestros oídos cosas extrañas. Queremos, pues, saber qué quiere decir esto.» (Hechos 17:16-20)
«Pero cuando oyeron lo de la resurrección de los muertos, unos se burlaban, y otros decían: Ya te oiremos acerca de esto otra vez. Y así Pablo salió de en medio de ellos.» (Hechos 17:32-33)
¿Cuántas veces hemos pasado por alto algo que el Señor ha querido enseñarnos porque no le hemos dado la oportunidad? ¿Cuántas veces hemos menospreciado la instrucción del Señor? ¿Cuántas veces hemos pensado que con lo que sabemos es más que suficiente?
Si esto nos sucede a menudo, leamos los siguientes puntos que nos regala la Palabra de Dios y notemos que nos falta aprender:
1. El Señor sabe absolutamente todo
«Grande es el Señor nuestro, y de mucho poder; Y su entendimiento es infinito.» (Salmos 147:5)
2. Es de sabios aprender de Dios
«Hijo mío, si recibieres mis palabras, Y mis mandamientos guardares dentro de ti, Haciendo estar atento tu oído a la sabiduría; Si inclinares tu corazón a la prudencia, Si clamares a la inteligencia, Y a la prudencia dieres tu voz; Si como a la plata la buscares, Y la escudriñares como a tesoros, Entonces entenderás el temor de Jehová, Y hallarás el conocimiento de Dios. Porque Jehová da la sabiduría, Y de su boca viene el conocimiento y la inteligencia.» (Proverbios 2:1-6)
3. Dios está en todo! Así que todo lo que está a nuestro alrededor nos enseña
«Porque las cosas invisibles de él, su eterno poder y deidad, se hacen claramente visibles desde la creación del mundo, siendo entendidas por medio de las cosas hechas, de modo que no tienen excusa.» (Romanos 1:20)
4. Si amamos a Dios, por muy difícil que parezca, de los problemas también aprenderemos
«Y sabemos que a los que aman a Dios, todas las cosas les ayudan a bien, esto es, a los que conforme a su propósito son llamados.» (Romanos 8:28)
5. Aprendemos también del Espíritu Santo
«Mas el Consolador, el Espíritu Santo, a quien el Padre enviará en mi nombre, él os enseñará todas las cosas, y os recordará todo lo que yo os he dicho.» (Juan 14:26)
6. Aprendemos de la Palabra de Dios
«Toda la Escritura es inspirada por Dios, y útil para enseñar, para redargüir, para corregir, para instruir en justicia, a fin de que el hombre de Dios sea perfecto, enteramente preparado para toda buena obra.» (2 Timoteo 3:16-17)
¿Nos interesa mostrar lo poco que sabemos? (Proverbios 18:1-2) ¿Será que tenemos algo nuevo que aprender del Señor?
No esperemos que el Señor nos diga tal como a Job…
«Escucha, Job, y óyeme; Calla, y yo hablaré. Si tienes razones, respóndeme; Habla, porque yo te quiero justificar. Y si no, óyeme tú a mí; Calla, y te enseñaré sabiduría.» (Job 33:31-33)
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Dios te continúe bendiciendo y que sigas teniendo un excelente día en Cristo Jesús!