Filipenses 4:4 (Felicidad)
“Regocijaos en el Señor siempre. Otra vez digo: !!Regocijaos!”
«No lo digo porque tenga escasez, pues he aprendido a contentarme, cualquiera que sea mi situación.» (Filipenses 4:11)
Según el diccionario, Felicidad es un estado emocional que es producido cuando una persona cree haber alcanzado una meta deseada. Pero si analizamos bien esta definición anterior, nos percatamos que podría ser efímero o temporal, por ejemplo, nos damos cuenta de personas muy exitosas que tienen tantos bienes y muchas cosas más, pero, se sienten vacías, solas y no tienen ni pizca de felicidad.
Sin embargo, está el otro lado de la moneda… Cuando dicen: “Es que yo nací sin oportunidades”, “Si yo hubiera tenido unos mejores padres”, “Si yo hubiera estudiado esto o lo otro… en fin “Si yo hubiera”
¡Qué dilema! ¿Será que la felicidad es algo que se alcanza o algo que el hombre ha creado para poder justificar un espacio de gozo o alegría?
La Palabra del Señor nos enseña que la felicidad no se encuentra en cuanto logre o tenga:
“Y les dijo: Mirad, y guardaos de toda avaricia; porque la vida del hombre no consiste en la abundancia de los bienes que posee.” (Lucas 12:15)
“A los ricos de este siglo manda que no sean altivos, ni pongan la esperanza en las riquezas, las cuales son inciertas, sino en el Dios vivo, que nos da todas las cosas en abundancia para que las disfrutemos.” (1 Timoteo 6:17)
Entonces, ¿Qué es la felicidad?
1. Felicidad es entender que somos un milagro
“Dios mío, tú fuiste quien me formó en el vientre de mi madre. Tú fuiste quien formó cada parte de mi cuerpo. Soy una creación maravillosa, y por eso te doy gracias. Todo lo que haces es maravilloso, ¡de eso estoy bien seguro! Tú viste cuando mi cuerpo fue cobrando forma en las profundidades de la tierra; ¡aún no había vivido un solo día, cuando tú ya habías decidido cuánto tiempo viviría! ¡Lo habías anotado en tu libro!” (Salmos 139:13-16 TLA)
2. Felicidad es entender que todo lo que tenemos es un regalo
“Dios nunca cambia. Fue Dios quien creó todas las estrellas del cielo, y es quien nos da todo lo bueno y todo lo perfecto.” (Santiago 1:17 TLA)
3. Felicidad es entender que cuando ya estaba todo perdido Cristo nos rescató
“Sólo hay un Dios, y sólo hay uno que puede ponernos en paz con Dios: Jesucristo, el hombre. Jesús dio su propia vida para salvar a todo el mundo. En el momento oportuno, Dios nos demostró que quiere salvar a todos.” (1 Timoteo 2:5-6)
4. Felicidad es entender que no vamos a ser bendecidos … ¡Ya somos bendecidos!
“Bendito sea el Dios y Padre de nuestro Señor Jesucristo, que nos bendijo con toda bendición espiritual en los lugares celestiales en Cristo” (Efesios 1:3)
5. Felicidad es entender que soy instrumento del Señor para ser bendición para los demás
“Por tanto, id, y haced discípulos a todas las naciones,bautizándolos en el nombre del Padre, y del Hijo, y del Espíritu Santo; enseñándoles que guarden todas las cosas que os he mandado; y he aquí yo estoy con vosotros todos los días, hasta el fin del mundo. Amén.” (Mateo 28:19-20)
Así que saquemos de nuestra cabeza el chip de concepto de felicidad que el mundo nos ha puesto. Adoptemos lo que el Señor nos dice en su Palabra, gocémonos con lo que el Señor nos ha dado y disfrutemos el día de hoy! Puede que no exista un mañana!
¿Qué no los impide? ¿Seremos felices o… somos felices?
Sonríe, Dios te ama!
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Dios te continúe bendiciendo y que sigas teniendo un excelente día en Cristo Jesús!