Romanos 9:20 (Alfarero)
«Mas antes, oh hombre, ¿quién eres tú, para que alterques con Dios? ¿Dirá el vaso de barro al que lo formó: ¿Por qué me has hecho así?»
Interrogantes y más interrogantes
¿Por qué me siento rechazado? ¿Por qué no encajo? ¿Por qué me pasa esto? ¿Por qué nací aquí? ¿Por qué no tuve acceso a esto u lo otro? ¿Por qué nací enfermo? ¿Por qué soy discapacitado? ¿Por qué justo los que me querían se murieron rápido? ¿Por qué no tengo mamá o papá, o ambos? ¿Por qué no tengo hermanos? ¿Por qué mis hijos me abandonaron? … Alfarero, ¿Por qué me has hecho así?
Toda nuestra vida nos enfrentamos a diferentes interrogantes…
Se gasta tanto esfuerzo, recursos y años tratando de hallar respuestas en médicos, psicólogos, filósofos… que a la final ellos también son personas que tienen igual o mas «por qué’s» sin resolver!
Vamos a la iglesia, pero antes de entrar dejamos afuera la maleta de los «por qué’s», luego entramos y levantamos manos, cantamos, escuchamos la Palabra pero al salir tomamos de vuelta la maleta.
Albergamos y pasamos mas tiempo en nuestra vida dandole lugar a tantas inconformidades, resentimiento, dolor, tristeza, abandono de nosotros mismos pero…
Amasar, moldear, pulir y hornear
En contraparte:
- ¿Alguna vez hemos escuchado de un alfarero que fabrique vasijas que no sirvan?
- ¿Sabíamos que lo que termina haciendo el alfarero con el barro o la arcilla es una obra de arte?
- ¿Sabíamos que existe un proceso para que esa obra de arte sea culminada?
Mientras estas preguntas nos hacen reflexionar y nos disminuyen el querer altercar con el Señor… ¿Sabíamos que el proceso de elaboración del Alfarero es amasarnos, moldearnos, pulirnos y hornearnos?
Somos una obra preciosa en las manos del Alfarero!
“Porque somos hechura suya, creados en Cristo Jesús para buenas obras, las cuales Dios preparó de antemano para que anduviésemos en ellas.” (Efesios 2:10)
“Ahora, así dice Jehová, Creador tuyo, oh Jacob, y Formador tuyo, oh Israel: No temas, porque yo te redimí; te puse nombre, mío eres tú.” (Isaías 43:1)
“Porque a mis ojos fuiste de gran estima, fuiste honorable, y yo te amé; daré, pues, hombres por ti, y naciones por tu vida.” (Isaías 43:4)
¡Somos una obra maestra!
El Señor se ha tomado su tiempo para crearnos, somos una obra maestra en sus manos, el Señor nos ha dado propósito y un sentido!
Dios nos ha hecho así porque no había mejor forma de hacernos! Mas bien, comprendamos que:
“Todo lo hizo hermoso en su tiempo; y ha puesto eternidad en el corazón de ellos, sin que alcance el hombre a entender la obra que ha hecho Dios desde el principio hasta el fin.” (Eclesiastés 3:11)
y …
“Lo que habéis oído desde el principio, permanezca en vosotros. Si lo que habéis oído desde el principio permanece en vosotros, también vosotros permaneceréis en el Hijo y en el Padre. Y esta es la promesa que él nos hizo, la vida eterna.” (1 Juan 2:24-25)
¿Nos seguiremos enfocando en porque Dios nos hizo así o mas bien leeremos la Palabra para que conozcamos el plan perfecto que Dios tiene para ti y para mí?
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Dios te continúe bendiciendo y que sigas teniendo un excelente día en Cristo Jesús!