2 Timoteo 4:1-4 (Fábulas)
“Te encarezco delante de Dios y del Señor Jesucristo, que juzgará a los vivos y a los muertos en su manifestación y en su reino, que prediques la palabra; que instes a tiempo y fuera de tiempo; redarguye, reprende, exhorta con toda paciencia y doctrina. Porque vendrá tiempo cuando no sufrirán la sana doctrina, sino que teniendo comezón de oír, se amontonarán maestros conforme a sus propias concupiscencias, y apartarán de la verdad el oído y se volverán a las fábulas.”
A lo largo de la historia hemos podido escuchar argumentos que se han levantado en contra del conocimiento de Cristo, tales como:
Que se halló el cuerpo de Jesús, Que Jesús ya regreso de modo invisible, Que Jesús se casó con Maria Magdalena y tuvo descendencia, Que al hombre le es permitido tener varias esposas, Que María subió a los cielos, Que existen muchos mas caminos además de Jesucristo, que la expiación de Cristo no fue completa, etc…
Increíblemente, aunque las anteriores y muchas más NO son verdad, (Además de que la Biblia no las menciona) muchos son los que van tras ellas…
”Mi pueblo fue destruido, porque le faltó conocimiento.” (Oseas 4:6a)
“Pues habiendo conocido a Dios, no le glorificaron como a Dios, ni le dieron gracias, sino que se envanecieron en sus razonamientos, y su necio corazón fue entenebrecido. Profesando ser sabios, se hicieron necios, y cambiaron la gloria del Dios incorruptible en semejanza de imagen de hombre corruptible, de aves, de cuadrúpedos y de reptiles.” (Romanos 1:21-23)
“Estoy maravillado de que tan pronto os hayáis alejado del que os llamó por la gracia de Cristo, para seguir un evangelio diferente. No que haya otro, sino que hay algunos que os perturban y quieren pervertir el evangelio de Cristo. Mas si aun nosotros, o un ángel del cielo, os anunciare otro evangelio diferente del que os hemos anunciado, sea anatema. Como antes hemos dicho, también ahora lo repito: Si alguno os predica diferente evangelio del que habéis recibido, sea anatema.” (Gálatas 1:6-9)
¿Sabes? La Palabra de Dios
“Lámpara es a mis pies tu palabra, Y lumbrera a mi camino.” (Salmos 119:105)
“… es viva y eficaz, y más cortante que toda espada de dos filos; y penetra hasta partir el alma y el espíritu, las coyunturas y los tuétanos, y discierne los pensamientos y las intenciones del corazón.” (Hebreos 4:12)
y toda
“… es inspirada por Dios, y útil para enseñar, para redargüir, para corregir, para instruir en justicia, a fin de que el hombre de Dios sea perfecto, enteramente preparado para toda buena obra.” (2 Timoteo 3:16-17)
Por ello es que
“Nunca se apartará de tu boca este libro de la ley, sino que de día y de noche meditarás en él, para que guardes y hagas conforme a todo lo que en él está escrito; porque entonces harás prosperar tu camino, y todo te saldrá bien.” (Josué 1:8)
Solo así podremos andar cabales, lúcidos y como de día (Romanos 13:13) porque así ya no andaremos en fábulas sino que conoceremos
“… la verdad, y la verdad os hará libres.” (Juan 8:32)
Cuidado
Es un llamado a que tengamos cuidado
“Porque se levantarán falsos Cristos, y falsos profetas, y harán grandes señales y prodigios, de tal manera que engañarán, si fuere posible, aun a los escogidos. Ya os lo he dicho antes. Así que, si os dijeren: Mirad, está en el desierto, no salgáis; o mirad, está en los aposentos, no lo creáis. Porque como el relámpago que sale del oriente y se muestra hasta el occidente, así será también la venida del Hijo del Hombre.” (Mateo 24:24-27)
“Así que, el que piensa estar firme, mire que no caiga.” (1 Corintios 10:12)
Por ello meditar y andar conforme a la Palabra de Dios es un diario vivir.
¿Vivimos en fábulas o en la Palabra de Dios?
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Dios te continúe bendiciendo y que sigas teniendo un excelente día en Cristo Jesús!